Una estación, un aeropuerto cualquiera...

Ayer de madrugada, un aeropuerto, una ciudad de provincias, una pareja que se come a besos ante la llamada a los pasajeros a embarcar.
Sus ojos no ocultan la tristeza que les emabarga, la noche huele a tristeza y despedida, pero el leve viento que sopla trae aires de un pronto reencuentro, de una noche apasionada, de mil millones de besos en un momento.
"Ultima llamada a los pasajeros, del vuelo ... con destino a Londres" resuena una voz enlatada por los altavoces. Es el momento el la aferra y la besa como si de ello dependiese su vida, asi fundidos en un lazo de amor, consumen sus ultimos instantes juntos hasta dentro de unos meses.
Y si señoras, aunque digais que no, a él se le escapan unas lagrimitas, de amor sincero y correspondido.
Por fin ella se pasa por la puerta de embarque, justo antes le da una carta donde le dice esas cosas que no hace falta escribir, cuando se mira a quien te quiere a los ojos.
En el aire quedan flotando unas palabras: "Te quiero"

Dedicado a Fletator, amigo y hombro donde llorar, que pasara unos mesecitos a dos velas. ANIMO que no es nada